Repentinamente, algo entro en su campo de visión por un costado, a su lado. Era una mano femenina, reconoció en seguida esa pulsera de hilo ya deshilachado que el mismo habia comprado hacia mas de un año. La mano le ofrecía, silenciosa, un mate recien cebado que humeaba un poco. Sonrió y lo aceptó. Ella se sentó a su lado sin decir una palabra. Ambos observaron el amancer, mateando en silencio. El pensó, un tanto avergonzado de su sentimiento de soledad de hacia un rato, que a su alrededor habia suficientes manos decididas a no dejarlo caer. Como la que le cebaba en ese momento. Como las que descansaban en el interior de la casa.
"Its a brand new day, Its a brand new day
for the first time in such a long long time I know...
I'll be OK"