Hacia dias que la lluvia no daba tregua, y no lo haria por unos cuantos mas, pero a ella no le molestaba. Se encontraba de pie, con la frente apoyada en su ventana, observando el panorama gris que el clima le brindaba. Esos dias siempre habian tenido la capacidad de convertirla de una persona alegre a otra cabizbaja y meditabunda. Pasaba gran parte del tiempo encerrada en su propia cabeza, lo que, en general, le resultaba provechoso porque conseguia ver las cosas desde otro punto de vista. Esta vez, sin embargo, despues de tantos dias grises, poco a poco una especie de tristeza la habia invadido. El proceso habia sido tan gradual que ella casi no lo habia notado hasta ese momento. Se sentia angustiada, con una gran presion en su pecho. Una unica lágrima rodó por su mejilla y ella la dejo surcar lentamente todo su rostro, hasta el borde, para, finalmente, caer sobre su mano, tambien apoyada en el cristal.

      Se dedico a observarla un rato. Justo un segundo antes de que desviara la mirada un rayo de luz del Sol se abrio paso por entre las nubes e iluminó su mano en el punto justo en el que se encontraba esa lágrima. Ella abrió grande los ojos y se movio de manera de que el Rayo le diera en una de sus mejillas y aunque la lluvia siguió cayendo densamente, este fue cobrando fuerza y tamaño, abarcando primero su rostro y unos segundos mas tarde toda su ventana. Ella giró y observó cómo todas sus cosas se tornaban doradas. Los colores habian vuelto, al menos por un rato. Miró de nuevo al Cielo y otra lágrima surcó su rostro, pero esta era de una naturaleza totalmente distinta a su hermana. La presión en su pecho habia desaparecido, ahora sentía una calidez tranquilizadora, y la certeza de que todo iba a estar mejor. Bajó un poco la vista y se sorprendió muchisimo al ver que su reflejo le devolvia una sonrisa.

"Long as I remember the rain been comin’ down.

Clouds of myst’ry pourin’ confusion on the ground.

Good men through the ages, tryin’ to find the sun;

And I wonder, still I wonder,

who’ll stop the rain?? "

   Miro por la ventana de su cuarto. Sonrio. La Hora Vintage habia comenzado. La habia bautizado asi por como la luz del Sol, con sus rayos ya casi perpendiculares, bañaban todo de un tono dorado. Era SU hora. Bueno, no solo suya.
   Tomó el termo y el mate ya preparado, dejó sus apuntes sobre el escritorio para ir a Su Lugar en el Mundo, como lo habia bautizado su Abuelo, de quien habia heredado esa pasion por las pequeñas cosas. Salio por el pasillo, abrió esa puerta de chapa blanca que daba a la terraza, que a esa hora se le antojaba una suerte de portal y se dirigió al rincón de siempre. Se sentó, se cebó el primero y dejo, por primera vez en el dia que su mente vagara por donde se le antojara, mientras se deleitaba con la vista que se le ofrecía.  Mucho Cielo, el techo de las casas vecinas y la copa de su propio arbol. Nada especial. Y a la vez todo.
  Sintió un ruido en la puerta y sonrió. Sabía perfectamente quien era el que se acercaba. Alguien se sentó a su lado. El, despacio, terminó su mate, cebó otro y preguntó, como de costumbre:
-¿Mate?
-Obvio, ¿Cómo no voy a querer un mate de mi nietito?- Contestó su Abuelo, siempre cariñoso. Tomó el mate, y preguntó, también como de costumbre: -¿Cómo estas?
  No era un saludo ni mucho menos, no a esa Hora. Era el inicio oficial de la Hora Vintage, ese momento intimo entre ellos que ambos disfrutaban mucho. Charlaban de todo y de nada, de su pasión común, la fotografia, de música y de todo lo que se les ocurriera hasta que el mate se lavaba.
Cuando el Sol finalmente se escondio, su Abuelo se levantó y se despidió. El se quedo unos minutos más, bajo el crepúsculo, pensando...Finalmente suspiró, juntó sus cosas y también se retiró.

La miró, al otro de la habitación llena de gente. Ella le devolvió la mirada. Rencores, malosentendidos y diferencias quedaron, en lo que duró esa fracción de segundo, olvidados. Ambos sonrieron apenas. Al instante, la realidad volvió a caer sobre ellos y el show continuó. El pensó que, en definitiva...el sentimiento solo, no sirve de nada...

Y la Vida siguió... 

"No puedo" susurró ella, aún con lágrimas en los ojos.

El se levantó de su lado, repentinamente furioso. Miró hacia el cielo estrellado un par de segundos, intentando contenerse.
Se dio vuelta y la miró de frente. Ella apenas pudo matenterle la mirada.

"No puedo" Repitió el, su tono de voz bajo no disimulaba en absoluto su enojo.
Lentamente fue subiendo el volumen, hasta acabar gritando:
"Siempre la misma excusa, siempre la misma tonta excusa, la misma mentira... Obvio que no podés.No podés porque decís que no podés!" 

Respiró profundo varias veces. Luego se agachó para que su cara quedara a la altura de ella.
Susurró, aún enojado, mirándola a los ojos:
"No hay nada que vos no puedas hacer, porque vos sos mi mundo"

A continuación se incorporó y la dejó sola, sentada en esa hamaca de plaza, bajo el cielo estrellado.

"Hacer versos malos depara más felicidad que leer los versos más bellos"

Hermann Hesse

(Supongo que esa es la razón por la que una y otra vez vuelvo acá) 

    Fue en esa hora mágica en la que el Sol comienza su breve juego diario. Quiere ser un ser vivo como cualquiera de la Tierra, poniéndose a su altura. Bañanando todo de sus tonos dorados. Haciendo todas las cosas mas llamativas. El siempre habia amado esa hora, en la que no sabia bien porqué, se sentia más vivo que nunca.
   Giró su cabeza y la miró, observó como el Sol arrancaba tonos hermosos de su piel, de sus ojos y de su pelo. Se dijo a si mismo lo que tanto habia intentado negar, incluso ante si mismo. La queria. Mucho. Sabia que no estaba bien. Sabia que era un error, y ella lo sabia también. Pero en ese instante entendió que era asi, y que no habia nada que pudiera hacer. Aunque quisiera.
   Ella notó su mirada. La conversacion, hasta el momento fluida, se cortó.

 -¿Que te pasa?
 -Nada, es solo que, te quiero, nada mas.

Lejos de parecer molesta, sonrió. Le murmuró apenas un "yo también", mirando a otro lado.
Lograron, a duras penas, retomar la conversacion. Pero como todo lo perfecto, terminó pronto. El Sol se cansó de su juego, y se hundió finalemte en el horizonte.

"Siempre fue asi nuestra historia

Que funcione o no

Que este bien o mal

Vivirlo con vos,

Para mi es La Gloria"

   

     No sabían bien cómo, pero ahí estaban. Ella, con su mejor vestido. El, de traje, a tono. Ambos estaban sentados en una banco de plaza, en el parque de un salón de fiesta, uno al lado del otro, sin saber como reaccionar. La música del interior del salón llegaba apagada hasta donde estaban ellos. Las estrellas brillaban sobre sus cabezas. Repentinamente ella rompió el silencio.

     - ¿Todavía me querés?

El la miró, sorprendido. Pensó unos segundos y respondió:

    - Cuando se quiere de verdad, siempre es a pesar de todo. Para mi, que me preguntes si te quiero equivale a preguntar si alguna vez te quise. La respuesta a eso la sabés muy bien. Si aún asi necesitas escucharlo de mi, si, te quiero, y mucho.


     Sus palabras flotaron en el aire un par de minutos. Ambos sabían que eso no cambiaba las cosas. Finalmente el se levantó, dando por terminado el Instante de Perfección. Comenzó a caminar lentamente hacia el salón. Se detuvo, sin saber porque. Giro despacio, ella estaba parada muy cerca. Cerró los ojos, justo mientras ella lo hacia. Por un segundo, pudo percibir ese aroma tan particular, esa mezcla entre ese perfume y el aroma de su piel que tenia tan grabado a fuego. Abrió los ojos despacio, sabiendo que solo vería un banco de plaza. No se equivocó. Retomó su lento camino hacia el salón, detrás de ella...

"Creo que hoy el viento me alcanzó  
 el olor de tu mejilla... " 

Nadie como tu

   Se acostó con esfuerzo, ayudado por su mujer. Habia pocas cosas que, a sus 85 años y con esa enfermedad de hace 5, podía hacer sin su ayuda. Esa enfermedad no era moco de pavo, pensó con tristeza. Mientras su señora caminaba lentamente hacia la cocina a prepararle su te de todas las noches, no pudo evitar pensar en cuánto su enfermedad había complicado la vida de su mujer. Cerró los ojos con fuerza y con dolor.
   Cuando ella regresó al cuarto, lo encontró llorando en silencio. Dejó el te en la mesa de luz, se sentó en la cama, y con una ternura y un amor infinitos, que 50 años de matrimonio, peleas, diferencias y rutina no habían logrado ni siquiera empañar, le tomó la mano, y le preguntó, como quien le habla a una criatura:

- ¿Que pasa viejito?

- Cada día es mas duro para vos. Soy un estorbo, aun así, ¿Me seguís amando?

  Ella hizo un ruido con la lengua y agito la mano, como espantando una mosca y respondió:
-Pero dejate de pavadas, sos el mismo guapo de siempre, obvio que te amo, y mas que nunca.                                                                                                         


  El cerró los ojos nuevamente, mas tranquilo. Siempre había sabido que la única muerte apacible posible para el sería mirando de frente esos ojos verdes, cargados de una ternura inmensa, inmune al paso del tiempo...

"Y pasarán los años y siempre estarás buscando un plan
para que se hagan realidad los sueños que
soñábamos antes de ayer al dormir
       hablando del tiempo que nos quedará por vivir. "

Sutil Recuerdo de un Mal Sueño

     Me convertiré, para vos, en un sutil recuerdo. O todavia mejor, en el sutil recuerdo de un recuerdo. Seré apenas ese mal sueño que hace que a mitad de la noche frunzas el entrecejo y agite tu respiracion.
     Pero tranquila, al amanecer ya no me recordarás. Jamás sabrás de mi de nuevo. Y si alguna vez, al pasar por alguno de los lugares que frecuantabamos, o al escuchar ese tema que cantabamos juntos, o al sentir la tormenta avecinarse acude a tu mente mi recuerdo, cual sombra sin nombre, dudarás si alguna fui real. Acusarás a tu imaginación, me hundirás de nuevo en tu olvido y seguirás con tu vida. Es lo que más deseo....

Estiro mi mano, y la observo... mis dedos ya están translúcidos...

"Sin embargo, estoy tirado,

y nadie se acuerda de mí,

paso a través de la gente,

      como el fantasma de Canterville. "

Quereme asi Piantao, Piantao, Piantao...

No somos todos los que podemos pasar mucho tiempo mirando un árbol, simplemente porque nos gusto el contraste verde-azul que este conforma con el cielo.


No somos todos los que en el tren, buscamos las puertas que no funcionan, solo para sentir el viento y soñar que volamos.


No somos todos los que, en nuestros 20 años, podemos disfrutar de una hamaca como un chico de 6 o 7, ante la mirada de desaprobación de quien pase (Gente, ser maduro no significa no poder disfrutar como un chico)


No somos todos los capaces de tomarnos el primer colectivo que pase por la esquina de casa, sin importar el destino, solo para viajar.


No somos todos los que preferimos la mesa que da a la calle en el Café, para poder observar a la gente caminar, como si fueramos de otra especie, en una suerte de zoologico.


Se nos trata de Locos, por estas pequeñas excentricidades.


Gente, si eso es estar Loco, bienvenida sea la locura a mi vida... Pueden decirme Loco, pero no soy el unico, y entre nosotros, nos reconocemos.


Todos los Genios han sido, antes que Genios, Locos. Tengo la esperanza de que todos los Locos, tengamos aunque sea una pizca de Genialidad....

"Loco sin remedio
ya ni el mundo te gira
loco sin consuelo  

[...]

 todo lo que quiera
puede imaginar y las penas olvidar..."

"Loco, pero Loco tuyo, ¡que se yo!
[...]
Quereme así, piantao, piantao, piantao...
Trepate a esta ternura de locos que hay en mí,
ponete esta peluca de alondras, ¡y volá!
¡Volá conmigo ya! ¡Vení, volá, sentí! "

"You may say that I'm a dreamer
But I'm not the only one..." 

As Tears Go By

       Mientras estaba sentado solo en ese banco el plaza, con auriculares en sus oídos, observaba a los chicos jugar, a las madres tomando mates y charlando, sin perder de vista a las criaturas, a las palomas picoteando el suelo cerca de el y a una pareja sentada en otro banco, al otro lado de la plaza, abrazados.
       Mientras Rostropovich seguía ejecutando esas maravillosas suites para chelo de Bach solo para el, fue testigo inalterable de como la tormenta se avecinaba... vio como una a una, las madres fueron llamando a sus hijos para volver a sus casas. Hasta las palomas se batieron en retirada. Finalmente, la parejita también se había levantado y abandonaba el lugar. Unas primeras gotas, frias, le mojaron el rostro. Nadie llego a ver la única lágrima que brotó de sus ojos, y que,  rápidamente, se fundió con el agua de la lluvia.....

"I sit & watch the children play
Smiling faces I can see
But not for me

[...]

I want to hear the children sing
All I hear is the sound
Of rain falling on the ground
I sit & watch
As tears go by...  "

Stand by me...

El se paró y atinó a irse...supuso que lo único que querria ella era estar sola....Pero algo lo detuvo, cuando se dio vuelta y la vio, con sus ojos inundados por las lágrimas, aferrándole con fuerza el brazo, comprendió que ese era el único lugar en el que tenia que estar. A su lado.


Alguien dijo alguna vez, que no importaba quién eras, a dónde ibas en tu vida, que en algún momento, todos necesitaremos que ALGUIEN, se quede con nosotros....

"If the sky that we look upon

Should tumble and fall

And the mountain should crumble to the sea

I won't cry, I won't cry

No I won't shed a tear

Just as long as you stand, stand by me... "

"Y vos tan frágil como aquella hojita que me pediste que guarde..."

       Hacia rato que la luz anaranjada del alumbrado público se había encendido. Llevaba sentado contra ese viejo paredón no menos de dos horas, presenciando en silencio el ocaso, pensando y pensando, como siempre. Definitivamente, el pensaba y luego existía. No siempre le daba resultado, pero era su forma de ser, era inevitable.
       Finalmente dio la ultima pitada a su moribundo cigarrillo, que por espacio de solo un segundo se iluminó con mas intensidad, luego, lentamente, apoyó la colilla al lado de su pie derecho y lo pisó, apagándolo. Y mientras exhalaba la ultima bocanada de humo no pudo evitar pensar que, así como había extinguido la mínima brasa con su zapato, al fin había logrado hacer lo mismo con esa relación que tan mal le estaba haciendo, casi tan mal como el cigarrillo. Aunque no hubiera sido tan sencillo. No sentía bronca, rencor, ni enojo. En el fondo la seguia queriendo, pero pensó que eso probablemente no cambiara nunca. Recordaba haber leído en algún lado algo así como que cuando uno queria de verdad siempre era a pesar de todo. Definitivamente era el pensamiento mas acertado que había tenido en toda la tarde.  Sonrió con un dejo de amargura.
       Por fin estaba en paz. Pensó que si lo había logrado con ella, no había motivo de peso como para que no hiciera lo mismo con ese otro vicio suyo, el humo...Con su nueva meta en mente, se levanto, arrojo el paquete de cigarrillos vacio al cesto y entro por la puerta....

Lago en el Cielo

Es temprano.. Todavia el Sol no salio, algunos pajaros cantan suave, cada tanto alguna que otra gaviota chilla. Esta de pie, quieto en un viejo muelle en forma de "T" esperando a que el Astro Rey se asome. No se mueve. Apenas respira. Y mientras observa extasiado el horizonte rosado fundirse con su propio reflejo en el agua formando una Simetría Perfecta piensa muchas cosas.

Piensa en lo raro que debe verse, una sombra encapuchada con una camara colgando del cuello, estatico.

Piensa en lo raro de sentirse tan lejos de casa, aun cuando ha estado en lugares más lejanos.

Piensa en Su Creador, admirando la belleza de todo lo que lo rodea.

Piensa en ella (¿Cuando no?) con melancolia. Susurra: "Seria tan sencillo que estuvieras aca..."

Finalemente el Sol se asoma en el horizonte. En sus labios se dibuja en sutil sonrisa. Aún estático, respira hondo... Disfruta el momento. Siente que valio la pena haber dormido poco y mal, haberse levantado tan temprano y estar pasando tanto frio. Sabe perfectamente que lo mas probable es que no consiga los resultados que espera. Sin embargo, su sonrisa se acentúa al momento de levantar su querida Canon AE1 para disparar.....

"Quiero ser suave para evitar tu dureza" 

 Cerati.

"Ella le pidió que la llevara al Fin del Mundo...

El puso a su nombre todas las olas del Mar..."

-Quiero viajar a algun lado con vos un par de dias... no importa a donde...¿Te gustaria?

     El la miró a los ojos durante unos cuantos segundos. Finalmente el respondió con voz suave y despacio, con los ojos brillantes y sin sonreir:

-Con vos iria hasta el mismisimo Fin del Mundo..

"Se miraron un segundo, como dos desconocidos...

Todas las ciudades eran pocas a sus ojos..."

   
   
      Miró hacia la derecha, al asiento del acompañante y la observó… Era hermosa cuando dormía….

      Habían decidido hacer ese viaje dominados por un impulso, ni siquiera tenian decidido de manera puntual el destino, simplemente coincidieron unos cuantos dias libres seguidos para los dos, armaron un bolso con algo de ropa y salieron.

      En medio de esa noche profunda y estrellada en la ruta no pudo evitar seguir observandola. Y se sintio PLENO, se dio cuenta de que no necesitaba nada mas para ser feliz.
     Esa ruta. Esas estrellas. Ese auto. Ella durmiendo a su lado, totalmente despreocupada, como si no importara el destino de su viaje. Como si nada de lo que dejaban atrás fuera lo suficientemente importante como para quitarle el sueño. Nada mas importaba. Solos ellos dos, avanzando quien sabe hacia donde, pero JUNTOS....
   

"-¿A donde vamos corazon de cristal?

 - A donde nadie, nadie, nadie estuvo..."

"Si te dibujo sin rostro

          es porque amo tu interior  "

      
      
       Disculpá si en tu presencia pongo mi mejor Poker Face, pero es que estoy cansado de esperar un par de ases que nunca llega, harto de que en tus dados nunca salga el 7.
      Y el croupier, que no es otro que el burlón Destino, me mira fijo con las cejas alzadas, dividida su expresión entre la diversión y el asombro de verme todavia de pie ante tu ruleta.
      Siento que jamas pude cantarte un jaque, mientras que vos, desde que los relojes estaban en cero, ya me tenias en mate con sólo mirarme.
      Disculpá, pero no me dejás opción, y aunque mis entrañas se retuerzan, siento que lo mas inteligente seria  darle un tincazo a este Rey Bobo, que lo único que quiere es quedarse de pie ante tu Reina y quedar a su merced.
      Disculpá, pero aunque sienta que me desangre en vida, voy a reunir fuerza, a apretar mis puños para que no notes que mis manos tiemblan, y, con la voz más firme que sea capaz de invocar voy a decirte a los ojos:

    -Me voy al mazo....

(Y el maldito ancho brilló por su ausencia)

"Y tu mirada azul me dijo "a cara o cruz" y mi alma de tahúr lo puso a "doble o nada"..."

- Dejá, ya fue, anda tranquilo…Ya estoy bien...

-¿Segura? mirá que si querés me quedo un rato mas con vos…

-No, en serio, andá, aparte ya te deben estar esperando…

 El, la miró un rato, como evaluándola. Ella espero tranquila hasta que el examen terminó. Aparentemente habia aprobado, porque el le dijo:
-Bueno, esta bien, pero yo voy a tener el celu prendido, asique cualquier cosa me avisas, ok?

Ella asintió con la cabeza y el finalmente se alejo, dejandola sola en aquella plaza inundada por aquel crepúsculo veraniego. En cuanto el dobló la esquina sus ojos automáticamente se llenaron de lágrimas...

“Decia, que morirse no era tan grave…

y agonizó en voz baja, por cortesia”

"¿Donde te escapas cuando una lágrima te viene a buscar?"

 Al mismo rincón de cielo.

A mi  Rincón de Cielo.

A ser de nuevo uno entre cientos.

Creyendo avanzar, sin saber a dónde.

Con el viento como compañero de viaje.....

     

      Se enderezó, y se despidió…. se subió al auto, prendió la radio y en el preciso instante en el que sintonizaba su emisora favorita empezó a sonar ese famoso tema de Bob Marley. Comenzó a cantarlo por lo bajo, y mientras lo hacia se dio cuenta de que aquella mujer a la que habia dejado en aquel estacionamiento, fumando su cigarrillo sentada a la luz de aquel maravilloso atardecer, podria haber sido, perfectamente, la musa inspiradora de esa canción. 

       Una MUJER con todas las letras, una luchadora. La vida la habia dado todo, solo para despues sacarselo. Pero ella nunca bajo los brazos, siguio peleando. Cosas horribles pasaban a su alrededor. El conocia apenas su historia, todo lo que sabia lo sabia de boca de ella, y aunque ella no le hablara mucho de su oscuro pasado lo poco que le habia contado le servia para darse cuenta de que en su vida habia conocido el sufrimiento. 

         Sin embargo, ella prefería hablar de cómo de a poco todo en su vida se iba acomodando. Hablaba de sus hijas y le brillaban los ojos. Sonreia con los ojos perdidos contando lo hermosa que estaba quedando la casa que con tanto sacrificio construia. Contaba, radiante, como finalmente tenia a su lado un verdadero compañero de vida.

         . El veia en esa mujer, ya no joven, aun no vieja, un ejemplo de vida. No eran amigos, apenas eran conocidos, pero el disfrutaba mucho las charlas con ella, porque era la viva prueba de que cada uno elije como vivir su vida y de que si uno elije vivir mejor, se puede. Aunque las condiciones  sean adversas. Aunque la suerte no ayude. Esas charlas con ella lo llenaban de paz y de esperanza, pero sobre todo de alegria, alegria de ver como ella finalmente encontraba, paradójicamente en la lucha misma, la paz interior que tanta falta le habia hecho.

"My feet is my only carriage,
So Ive got to push on through.
But while Im gone, I mean:
Everythings gonna be all right!

                               So, no woman, no cry;"                         

" If every man says all he can, 

If every man is true, 

Do I believe the sky above.... 

Is Caribbean Blue...."

"Nunca sabes donde vas a encontrar la luz y la felicidad"

Me permito "robartela"

Te adoro.

Todavía no lo puede creer. Pero se siente bien, mejor, al menos. Desde que ese desconocido se sentó en la misma mesa que ella en aquel café hace cosa de media hora no dejo de escuchar otra cosa mas que su propia voz. El, sentado en la otra mesa, de alguna manera, sintió que ella estaba mal, no la conocía, no sabia su nombre ni la había visto nunca. Pero al observarla solo un segundo noto en sus ojos que ella sufría por dentro. Sencillamente se acerco a su mesa, se sentó y le dijo:

–Te escucho, no tenés porque confiar en mi, es la desventaja de que sea un desconocido para vos. Pero tampoco tenés motivos para desconfiar, asique si te sentís a gusto hablando, simplemente te escucho….

Ella al principio se asusto, pero algo en su interior le dijo que podía confiar en el. Y así lo hizo. Le contó todo. A medida que hablaba se empezó a sentir mas tranquila y perdió el miedo, la desconfianza y el pudor. Le contó a ese perfecto desconocido cosas que nunca en su vida le había contado a nadie. Hablo y hablo por espacio de no menos de media hora. cuando por fin termino se sentía en paz. No podía creer que se hubiera podido abrir así.Miro a los ojos al hombre que estaba sentado al otro lado de la mesa, quien no había pronunciado palabra alguna desde el principio, pero que había escuchado con atención cada una de sus palabras. Lo miro con inmensa gratitud y le dijo:

- No se cómo agradecerte. Para mi fue muy importante sentir que me escuchabas, y que no lo hacías por respeto o por obligación. Lo hiciste porque querías. ¿Como puedo agradecerte?

El la miro con una enorme sonrisa y le dijo:

- La mejor manera que tenes de agradecerme es que alguna vez, porque si, sin ningún motivo, ayudes a alguien. Aún cuando no lo conozcas. Es más, si no lo conoces mejor.

- ¿Es por eso que hoy me ayudaste? ¿Alguien te ayudo y te pidió que hicieras lo mismo?

-No es lo importante. Lo importante es hacerle sentir a la gente que el mundo no se olvido de ella. Recordarle que entre toda la masa de seres humanos que se mueve de un lado a otro sin sentido todavía existe gente a la le importa lo que le pase al de al lado.

Ella lo miro largamente, todavía procesando sus palabras. Finalmente el se levanto de la mesa, y sin dejar de sonreírle se despidió:

-Nos vemos en alguna otra vida…..

Mientras lo veía perderse entre la multitud de gente que avanzaba al otro lado de la ventana no pudo evitar sonreír….