Pero tranquila, al amanecer ya no me recordarás. Jamás sabrás de mi de nuevo. Y si alguna vez, al pasar por alguno de los lugares que frecuantabamos, o al escuchar ese tema que cantabamos juntos, o al sentir la tormenta avecinarse acude a tu mente mi recuerdo, cual sombra sin nombre, dudarás si alguna fui real. Acusarás a tu imaginación, me hundirás de nuevo en tu olvido y seguirás con tu vida. Es lo que más deseo....
Estiro mi mano, y la observo... mis dedos ya están translúcidos...
"Sin embargo, estoy tirado,
y nadie se acuerda de mí,
paso a través de la gente,
como el fantasma de Canterville. "
No hay comentarios:
Publicar un comentario